El ser humano requiere de un buen habito alimenticio para su buen funcionamiento, y una de estas prácticas, debe ser el consumo adecuado de agua. La absorción insuficiente de esta, es uno de los factores principales del riesgo de mortalidad mundialmente.

El agua es el componente básico del aparato locomotor y esta representado en valores del 60 al 70% del peso corporal. Una buena alimentación, acompañada de un óptimo consumo de agua, permite reducir el riesgo de padecer enfermedades crónicas tales como: coronarias y/o cardiovasculares, hipertensión, diabetes, obesidad y cáncer, entre otras.

Por lo anterior, al organismo humano se le debe propiciar una ingesta adecuada de agua, cuyos valores están basados en el peso de las personas, funcionando de la siguiente manera: La fórmula general es dividir el peso físico en kilogramos sobre 7, siendo el resultado la cantidad de vasos de agua que se deben ingerir al día. Por ejemplo: si la persona pesa 70kilos, entonces seria 70kg /7 = 10 vasos de agua por consumir, los cuales deben ser cada uno de 250 mililitros, lo cual que representan las 8 onzas por cada kilo de peso que se debe tomar.

El color de la orina es un gran indicador de la hidratación, ya que las diferentes tonalidades revelan su estado:

• Orina muy clara: indica que la persona está tomando agua en exceso. La ingesta exagerada de agua puede acarrear una sobrecarga del riñón, pérdida de sales minerales, somnolencia y malestar.
• Amarillo claro: el color ideal.
• Amarillo oscuro: es considerado normal, pero debes estar atento y comenzar a tomar un poco más de agua.
• Color de “miel”: señal de deshidratación. Es vital tomar más agua.
• Naranja: puede estar relacionado a la falta de agua o una sustancia colorante de alguna comida. Si el color permanece por algún tiempo, puede ser algún problema en el hígado o vesícula. En ese caso debes buscar un médico lo antes posible.
• Efervescente: puede indicar exceso de proteína o problema renal. En ese caso debes buscar un médico lo antes posible.
• Rosa: motivo para preocuparse, puede significar problemas en el hígado, riñón, próstata o infección. En ese caso debes buscar un médico lo antes posible.
• Marrón claro: indica deshidratación severa o alteraciones en el hígado.
• Azul o verde claro: resultado de un alimento consumido, alguna medicación o una infección. 

Para tener en cuenta:
Las necesidades de hidratación pueden variar según diversos factores como: edad, sexo, contextura física, tasa de sudoración, nivel de actividad física, temperatura y humedad ambiental, el entorno, entre otras. En estos casos se debe de consumir un litro más por día.